Tenemos los malagueños la suerte de apostar por un pintor inigualable en sus trazados vanguardistas, cuyas obras siguen causando estupor en plena época de crisis; así se demuestra con uno de sus cuadros, de 1932 "Desnudo, hojas verdes y busto", subastado por 81 millones de euros.
Tuve la oportunidad de visitar en el 2008 la exposición que se llevó a cabo en el Museo Reina Sofía (Madrid), cuyas obras ocupaban cinco amplísimas salas -creo no equivocarme-. Dichas obras maestras fueron trasladadas íntegras desde Francia. No tengo palabras para explicar las diversas sensaciones visuales y emocionales que experimenté al ver algunas de esas obras en primera persona. Me sorprendió la grandiosidad del "Gernica", toda su tauromaquia y las distintas bañistas.
Este pintor fue y será un gran tesoro cultural y artístico para esta tierra sureña.
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